¡No soporto a mi hermana!

¡No soporto a mi hermana!


Recuerdo cuando era soltera y vivía con mis padres y mis hermanas, en muchas ocasiones ¡No los soportaba! Como dicen coloquialmente: vivíamos «como perros y gatos». Frases como: ¡Te lo dije! ¡No me agarres mi ropa! ¡No toques mis cosas! ¡Salte de mi cuarto! —entre otras— eran constantes en mi casa.

Hace unas semanas atrás, empezamos a estudiar el libro de 1 Juan con un grupo de amigas, y Dios me ha hablado constantemente de muchas formas. No obstante, una de las principales enseñanzas es la relación con mis hermanas.

Hoy quisiera que meditaras en la relación con tu familia, tus hermanas, hermanos, padres, primos, sobrinos, hermanas en la iglesia ¡En fin! Las relaciones más cotidianas en tu vida ¿Son buenas? ¿Tienes una relación de amor filial? ¿Eres amables con ellos? La siguiente pregunta es más extrema: ¿Los amas?

Luz vs. Tinieblas

El libro de 1 Juan capítulo 1 verso 5 al 10 dice 5 cosas muy interesantes:

  1. Dios es Luz y no hay tinieblas en Él (v. 5).
  2. Mentimos y no practicamos la verdad si decimos que tenemos comunión con Dios y estamos en tinieblas (v. 6).
  3. Si andamos en luz entonces tenemos comunión unos con otros (v.7)
  4. Si decimos que no tenemos pecado nos engañamos a nosotros mismos, le hacemos mentiroso a Él y su Palabra no está en nosotros (v. 8 y 10)
  5. Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para limpiarnos de toda maldad por medio de su hijo Jesús (v. 7 y 9)
¡Qué interesante! No dice que andamos a media luz, dice que andamos en tinieblas o en luz. No podemos decir que nunca hemos pecado porque nos engañamos a nosotras mismas ¿Conoces a alguien que dice tener comunión con Dios y no practica la verdad? ¿Tú misma estás en esta situación?

Comunión

¿Qué es andar en tinieblas? Juan dice que andar en luz es estar en comunión unos con otros. Esta palabra tiene dos definiciones, una de ellas dice que es un grupo de personas que profesan la misma religión. Pero la segunda dice que es unión de dos o más cosas que tienen en común. Comunión es un término que surge de la alianza entre las palabras común y unión.

¿Quiénes están unidos con nosotras por cosas en común? ¿Nuestra familia? ¿Nuestros hermanos en la iglesia? ¿Nuestros compañeros de trabajo o de equipo deportivo?

Aquí es donde recordamos el primer y más importante mandamiento que Jesús le dijo a un religioso en Lucas 10 versos 25 al 28 en el que dice: Ama a Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu fuerza y con toda tu mente y ama a tu prójimo como a ti mismo. Más adelante el religioso le pregunta a Jesús ¿Quién es mi prójimo? Y Él le responde con la historia del buen samaritano (versos 29-37), donde le dice que su prójimo es el que tiene en el camino.

Ahora quiero retarte a que medites y te analices. Haz a ti misma las siguientes preguntas sin justificarte ni ser autocondescendiente: ¿Estoy en comunión con Dios y con mis hermanas, o no las soporto? ¿Amo a mi prójimo o me es indiferente? Al contestar estas dos preguntas ahora puedes contestar la siguiente: ¿Estoy en luz o en tinieblas?

Si te has dado cuenta que estás en tinieblas —no importa si eres cristiana o no— te invito a reconciliarte con tu familia (incluyendo la familia espiritual) aunque creas que es injusto. Principalmente reconcíliate con Dios, arrepiéntete, búscalo y entrega el control de tu vida a Él, recuerda que Él es Fiel y Justo para limpiarte de toda maldad ¡Sólo hazlo!

Con cariño, Gaby Ramírez

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